Otra vez los motochorros: los siguieron y los amenazaron con total impunidad a la vista de todos

El episodio delictivo ocurrió este sábado 25 de enero a eso de las 22.30 hs en inmediaciones de Av. Italia y Los Pinos del centro, una zona de mucha actividad por los locales gastronómicos. Allí una pareja llegó huyendo de los delincuentes desde el Acceso Oeste, que los alcanzaron para robarle la moto y terminar huyendo, no sin antes apuntarles con un arma de fuego a la vista de comensales y trabajadores 

Una pareja vivió una noche netamente de terror este sábado a eso de las 22.30 hs, cuando fue abordada por motochorros con la finalidad de quitarles su rodado. Pero eso no fue lo peor, sino que además de que los amenazaron con un arma de fuego, esto fue a la vista del público ya que sucedió en inmediaciones de Avenida Italia y calle Los Pinos, es decir una zona con mucha actividad gastronómica ubicada en el casco céntrico de la ciudad. Algo que habla a las claras de la total impunidad con la que cada vez más se manejan los delincuentes. 

Según la denuncia que radicó en la Comisaría 1º Pablo, quien viajaba junto a su novia Natalia por el Acceso Oeste, al bajar del mismo en el puente San Fernando y detenerse en el semáforo de la calle Dr. Luis Leloir y Avenida Ricardo Balbín, se percató de la presencia de una moto de alta cilindrada y de color rojo, en la que circulaban dos individuos que comenzaron a seguirlos.

Fue así que aceleró con la intención de perderlos, siguiendo por Leloir hasta Las Marías, luego tomando Los Granados para concluir en la arteria Los Pinos y llegar hasta la Avenida Italia, donde los motochorros les dieron alcance. Acto seguido quien oficiaba de acompañante bajó del rodado y extrajo un revólver, para exigirle a viva voz que se bajara de la moto. 

Entonces segundos después el sujeto abordó la moto robada y emprendió la fuga por la calle Las Marías sentido a Dr. Leloir, tras lo que los perdió de vista. En cuanto a la descripción de los ladrones, mencionó que ambos llevaban gorra, ropa deportiva, también que los dos estaban armados, y en lo que refiere al acompañante, dijo que era de corta edad (presumiblemente menor) y con una nariz muy pronunciada como característica física sobresaliente. 

La moto es marca KTM, modelo Duke 390, de color naranja con detalles en color gris oscuro, dominio A209CSU. Como siempre decimos, ante cualquier información o dato fehaciente comunicarse al 911 o con la Comisaría 1º al (0237) 484-0000/3398 ó 485-2222. 

"Dudó en robar porque había mucha gente"

Lamentablemente, los robos de motochorros ya casi que a esta altura no son noticia. Lo que termina siendo más noticia en sí es el modus operandi que emplean. Pero en este caso, obrar con tanta impunidad amedrentando a alguien a la vista del público para robarle, es algo pocas veces visto. Gente que se encontraba comiendo en ese momento en los locales de la zona, como también deliveries, fueron testigos del desagradable momento. 

Uno de ellos dialogó con La Posta Noticias y explicó que "yo estaba parado al lado de mi moto, afuera del local, como siempre cuando no hay pedidos, y veo que viene una pareja en una moto que se frena al lado de la mía", por lo que cuando se hizo presente el otro rodado (el de los delincuentes) pensó que se trataba de una "carrera entre amigos". 

Pero el panorama cambió rotundamente "cuando la chica empezó a gritar pidiendo ayuda. En un momento quise reaccionar porque no vi armas y cuando hice un paso para adelante el acompañante sacó un arma y nos apuntó a la chica y a mí", agregó.   

A la vez que aclaró que sacó el arma "cuando el otro (quien hacía de conductor) lo empezó a apurar porque dudó en robar ya que había mucha gente y estaba yo al lado de la moto. Pero no les importó nada y sacaron el arma adelante de más de 10 personas que habría comiendo. Después en contramano y a alta velocidad, se fueron como si nada".  

Según describió el joven delivery, la moto que utilizaron los malvivientes era marca Benelli de color negro. Además de que, por lo que escuchó de boca de las propias víctimas, "los venían siguiendo desde Castelar".  

Algo que fue confirmado por la propia mujer a este medio horas después: "cuando salimos del peaje de ahí nos empezaron a seguir cuatro motos. Mi novio aceleró y creímos haberlos perdido. Bajamos en el puente San Fernando mirando para todos lados y no venía nadie", pero ya circulando sobre Leloir "de la nada salió una moto, no era de las que nos seguían. Y de ahí nos empezó a seguir".  

Por lo que tiene la teoría de que "estaban escondidos en la Colectora porque no los vimos", y no descarta que operen como una organización delictiva "que se van avisando. Incluso varios metros antes del puente San Fernando había una moto sin luces con uno arriba que nos miró, pero no nos siguió. Seguro se pasan la data, sino no sé".