
Conflicto vecinal lleva meses con episodios de violencia extrema y denuncias que se acumulan en la Justicia
Las denuncias vienen desde el año pasado contra los integrantes de una familia que, según dicen quienes los acusan, "molestan a todos en el barrio". Las acusaciones involucran golpes, destrozos y amenazas de muerte. El terror de los denunciantes y el pedido de intervención de la Justicia.
En la mayoría de las más de 10 denuncias a las que pudo acceder La Posta, las personas acusadas son una joven llamada Sara, su pareja Nahuel y el hermano de Sara, Pablo (alias "El Mono"), aunque también mencionan al padre de ambos, Antonio, entre otros. Hay dos familias que tienen un historial de conflictos con estas personas y que facilitaron a nuestro medio para su difusión, con la esperanza de que la violencia cese antes de que ocurra una tragedia, que por los videos e imágenes recibidos, es cuestión de tiempo si las autoridades no intervienen.
Melina (30) y Rolando (38) viven en la calle El Ombú al 200, en el barrio El Ombú, y viven allí desde enero del 2024 cuando se mudaron. Tienen conflictos con los denunciados desde agosto del 2024, cuando un perro que habían adoptado se les escapó de su finca. "Antonio nos dijo que el perro había matado a una de sus ovejas, por lo que mi marido llegó a un arreglo con él, pero al otro día vino su hijo Pablo a amenazarnos", contó Melina.
El 10 de marzo la pareja hizo otra denuncia, asegurando que Pablo había pasado caminando por la puerta de su casa y había llamado a su perro para que se fuera con él. Cuando Rolando le preguntó por qué lo hacía, el sujeto respondió con insultos y minutos después volvió con Antonio, Teresa, (la mujer de este), Sara y Nahuel y entre todos los atacaron a golpes de puño, patadas y hasta piedrazos en la cabeza. "A mi marido le rompieron la cabeza", contó Melina, que volvió a denunciar el último 6 de abril, cuando señaló que Sara la amenazó en la calle, la insultó y la atacó y la hirió en su mejilla con un palo de escoba roto en un extremo para generarle una "punta".
La otra familia denunciante es la de Nancy (33), que vive en la misma cuadra. Aseguró que los conflictos comenzaron en enero último, cuando "habíamos ido a la plaza del barrio y mi hermano discutió con Sara, tuvo un cruce de palabras con ella y con el hermano. Pero cuando nos volvíamos vinieron todos sus familiares, como veinte, y le pegaron a mi hermano, con palos, botellas, delante de los nenes, no les importó nada". Desde aquel episodio, la mujer tiene varias denuncias por distintas situaciones ocurridas en la cuadra donde vive, cada vez que se los cruza.
"Hace dos meses que mi nena no va al jardín, tenemos miedo. Mi hijo más grande se fue a vivir con su abuela a San Miguel, por todo esto", contó Nancy. El 20 de marzo, denunció que Sara y los suyos se presentaron en su domicilio a los gritos y les arrojaron ladrillazos, amenazándolos de muerte. "Mi novio, que tiene 18 años y vive conmigo, tiene un revólver calibre 38 y disparó unos tiros al suelo para que se vayan, pero media hora después vino la Policía y se lo llevaron detenido. El está detenido desde entonces por intentar defenderme y ninguno de esta familia está tras las rejas", señaló, tal como también aclara en la denuncia.
El 25 de marzo denunció que Sara le cortó la luz desde el medidor de la calle y que su pareja le rompió el portón de un fierrazo, y el último episodio denunciado días atrás, la acusó a la joven de golpearla con la parte plana de un machete en la cabeza. "No podemos más vivir así", cerró Nancy, que tiene documentación que revela que la UFI N°9 dispuso restricciones perimetrales para los denunciados.