"No quiero tener más miedo": el calvario de una chica rodriguense que denunció a su ex novio por violencia de género
Jazmín tiene 21 años y mantuvo una relación de casi cinco con su ex novio, a quien recientemente denunció por violencia de género. Días atrás, expuso las agresiones que sufrió tras acusar que recibe amenazas de parte de la familia de él, un joven de casi su misma edad.
La chica rodriguense publicó fotos de los hematomas de golpes que sufrió y videos de situaciones violentas vividas con su ex novio, según ella, tomó la decisión tras recibir las amenazas de parte de su ex suegra y ex cuñada, e incluso de él a través de "cuentas truchas" con las que la viene acosando por redes sociales.
"Empezamos la relación cuando yo tenía 17 y él 16 y al principio era muy lindo y bueno conmigo, pero el Día del Amigo del 2021 tuvo su primera reacción violenta cuando se enojó conmigo porque pasé ese día con mis amigas, algo que había acordado con él. Fue a buscarme a lo de mis amigas y dijo que su único amigo era él y se empezó a golpear la cabeza contra el volante del auto. Después me pidió perdón y lo perdoné, como muchas veces hice", contó.
Jazmín relató que primero convivieron en la casa de ella y su familia, porque "su propia familia lo echaba constantemente. Y cuando finalmente nos fuimos a vivir juntos, todo empeoró. Él no quería trabajar. El alquiler lo pagábamos mi hermana y yo. A pesar de eso, me echaba de la casa que yo misma sostenía,(aclaro que se daba el lujo de siempre echarme por el simple echo de que quien nos alquilaba era su tía) cada vez se volvía más violento. Me llegó a golpear y arrastrar por el piso".
Aclaró en su posteo: "Tengo pruebas de todo lo que viví: fotos, audios, mensajes y videos. Durante nuestra relación y también después de cada separación él seguía acosándome: me llamaba y me mandaba mensajes a mí y a mi familia, se aparecía en mi trabajo, saltaba el paredón de mi casa y entraba a mi pieza a la madrugada , llegó a amenazar con quitarse la vida si no volvía con él en varias oportunidades. Como pasa muchas veces, me prometía que iba a cambiar. Pero cada vez que volvía, al poco tiempo, todo volvía a ser como antes: los gritos, los insultos, los ataques físicos, arrancarme de los pelos, pellizcarme la boca para callarme, faltarle el respeto a mi casa y a mi familia no le importaba siquiera mis hermanitas chiquitas, pero que quede claro que él psicópata siempre sabía donde comportarse y donde no, y en qué momento victimizarse, todo mi entorno lo conoce y sabe lo que es.
Me decía justificándose que era así porque sufrió mucha violencia por parte de sus papás pero juraba cambiar, llegué hasta normalizar toda la violencia".
Por último, mencionó a La Posta: "En el último tiempo se puso más violento de lo normal, Yo no me juntaba con nadie, no daba señales de vida y mi familia me buscó y fue a mi casa para preguntarme que pasaba. Les dije que estaba todo bien, y ellos me preguntaron -su voz se quiebra- '¿te parece que está todo bien?' Tenés a toda tu familia que te quiere y apoya'. Y ahí me hizo un click. Ese día me fui, pero antes me pegó un cachetazo y me pegó patadas, caí sobre las bolsas de ropa que había preparado para irme. Su mamá siempre lo avaló, siempre supo como él fue pero ella decía que lo tenía que atender, que eso hacía una mujer. Dejé las cosas ahí por sugerencia de la Policía, porque era peligroso hasta esperar la orden judicial para poder ir acompañada a retirarla. Desde ahí su familia me amenaza por redes sociales. No quiero tener más miedo, por eso publiqué todo".
Además del daño emocional que Jazmín dice que toda esta historia le dejó, también afectó, por supuesto, su vida laboral. "Yo ayudaba a mi hermana con su emprendimiento de tortas y trabajaba en una combi escolar y mi jefe me echó porque falté dos días por todo esto y no le quise decir a él los motivos, sentía vergüenza", contó la joven, que ya tiene un botón antipánico otorgado por la Justicia por si su ex se acerca a ella.